Un papá.
Amigas.
Viajar en mi cumpleaños.
Pintarme el cabello.
Nadar en el mar.
Volver a enamorarme.
Probablemente la lista siga creciendo, y aunque parezca tener algunas de las anteriores, no es como yo quisiera.
No tengo que dar a explicaciones a nadie, pero pasan los días y me siento sola a pesar de estar rodeada de gente. Estos son los pensamientos que no salen de mi mente.
Escribo en un mar de lágrimas, con un grito atorado en la garganta, ahogándome mientras intento pedir auxilio.
Quizás no he sufrido lo suficiente como para merecerme todo lo bueno que me deseo. Quizás no sea el tiempo ni el momento; lo que sé es que nada de lo que yo logre a partir de este momento me hará sentir plena, porque solo estoy siendo condescendiente con esto a lo que llaman "vida".
Quiero dormir y no despertar.
Pero mañana es un nuevo día para volver a empezar y fingir que todo esta bien y que nada malo va a pasar.