miércoles, 26 de diciembre de 2012

¿Por qué? No sé.

Es imposible explicarlo, solo sucede, lo sientes, lo sabes y ya.

Empiezas a querer a un extraño, alguien que no conoces ni ves tan seguido, alguien a quién no le importas de la misma manera que te importa a ti, alguien al quien solo llamas por un nombre, porque no sabes si tiene dos o tres, alguien con quien tienes cosas en común y, al mismo tiempo, nada.
Alguien.
Solo alguien.

¿Cómo es posible querer a alguien sin conocer?, alguien al que piensas muy seguido sin saber porqué.
No sé, solo pasa, de un tiempo a otro, no sé como.
No sé.

¿Por qué?
No me preguntes, ni yo misma sé.

Me lo pregunto todos los días... Todos los días que pienso y no pienso en ti. Igual, si no te pienso, pienso porque no te pienso y así termino pensando en ti.
No entiendo por qué.
¿Qué hago pensando en ti?
No sé. No quiero saber.

¿Si te sueño?
Ya no tanto como antes, pero te pienso.
Te pienso y te imagino.
Converso contigo mientras me miro al espejo,
beso paredes imaginando que es contigo.
Me recuesto en el sofá y acaricio el viento
imaginando burdamente que es tu cabello.
Me siento en el parque y te miro,
te miro en el vacío. Te miro.
Te sonrío,
me tomas de mano y damos un paseo infinito.
Te abrazo cuando voy a dormir
y te siento respirar al despertar.

Te pienso, te miro, te siento.
¿Por qué?
No sé, no quiero saber.

¿Si te quiero?
No sé, ni quiero saber.