martes, 4 de octubre de 2022

ausente-

Ojalá pudiera devolverme todo lo que te di y no me devolviste,
todas las noches de desvelo, de llanto;
todo el miedo y la angustia acumulados,
ese grito de dolor que no termina de salir de mi pecho
y el perdón que te di,
cuando ni siquiera a mi misma me había disculpado.

Días como hoy, me duele seguir aquí,
(re)preguntándome si merezco esto;
después de todo siempre soy yo la que elige quedarse,
menos por amor, y si queda algo de respeto.

Duele no estar aquí, 
duele extrañarte y pensar que todo o nada es suficiente.
Duele la herida que jamás sano,
la que intento maquillar en mi soledad, en la habitación.

Quisiera que jamás vivas lo que yo,
que jamás sientas lo que yo,
que se te de todo lo que quieres y deseas,
que nada te falte,
que nada te hiera,
que vivas en paz y no en constante guerra.

Que te amen tan fuerte
como para darte tu lugar
y luchar por ti,
que no minimicen nunca lo que sientes,
que no te mientan, que no te oculten;
que te den todo lo que no me han dado a mi.



lunes, 8 de agosto de 2022

08082022

 

Merezco alguien que me de mi lugar, que me tenga como prioridad, que no tenga miedo de enfrentarme y de enfrentarse conmigo, de la mano, como un equipo, como pareja, de presumirme, que no sienta vergüenza de mí, que sea sincero conmigo y consigo mismo, que confié en mí y me dé la confianza para creer en él, que se la juegue por mi, que no me haga sentir insuficiente, que la tenga clara, y se vaya a todas y por todas conmigo.


lunes, 20 de junio de 2022

des(a)costumbr-arse

Cuando se somatiza la ansiedad:
Me duele la garganta, 
se me adormece de la cara, los labios, las manos,
y hasta pierdo la movilidad de la mitad de mi cuerpo.
Se me quiebra el cabello, se me cae el cabello.
Me duele la espalda, me tiemblan las piernas.
Me palpita a mil el corazón y me duele muy fuerte el pecho, 
como si estuviera rota por dentro, 
y lloro; lloro sin poder detenerme, sin poder consolarme.

Ayer casi me fue imposible pararme de la cama, pero lo logré, porque tenía que comer, tenía que ducharme, tenía que vivir.

Hoy estoy triste, y quizás siga angustiada.
Sigo nerviosa, sigo ansiosa, y sigo preguntándome por qué soy así...
Intento respirar pero no logro más que seguir ahogándome.
Las lágrimas no dejan de salir y recorrer mis mejillas como lluvia torrencial.
Beber agua no me está ayudando a oxigenarme.
He intentado tomar una ducha larga, con agua tibia, pero termino recibiendo el chorro helado para despertar e intentar volver a mi realidad, esa que me está costando mucho afrontar.

Días como hoy necesito un abrazo, que se acurruquen conmigo y me hagan mimos, que me digan "te quiero", y que con aquella compañía me hagan sentir que todo va a estar bien. A veces necesito que me den amor, porque sola no puedo. A veces estoy rota, y aunque siga recogiendo y pegando mis pedazos, para fingir que todo está en orden, hoy siento que no puedo sola. Hoy no puedo; sin embargo, aquí estoy, una vez más: sola, abrazándome, acurrucada en la cama, acariciándome, repitiéndome una y otra vez que me quiero y que todo va a estar bien. 

Que duro es este proceso. Y que fuerte soy al final del día. 






sábado, 11 de junio de 2022

vos-otros

Y me sigo rompiendo en tus brazos, como si fueras a a(r)marme de nuevo; y te sigo besando los labios, aunque ya no sean míos.  Te sigo acariciando si me lo pides, te sigo entregando todo lo que tengo aunque le ponga freno. Te sigo amando aunque no me quieras, te sigo queriendo aunque no te tenga. 

jueves, 2 de junio de 2022

fotos en la billetera

¿Cuántas despedidas más vendrán?
¿Cuántos nuevos correos, cartas no enviadas, redes sociales bloqueadas, silenciadas, eliminadas bastarán para avanzar?
Como si todo lo que hiciera para no pensarte fuera una intención válida para olvidarte al fin.

Me cuesta pararme de la cama otra vez, 
empezar de cero se ha vuelto un deporte extremo. 

Todos los días me miro al espejo y te lloro, porque aún ausente sigues presente. Y por más que grite con la almohada pegada a la cara, arranque las sábanas del colchón, las tire al piso, me golpeé la cabeza contra la pared y termine tirada en el piso ahogada en llanto, nada es suficiente para dejar de sentir este vacío, o seguir llenándolo con dolor.

Escucho canciones nuevas, pero todas traen tu recuerdo.
Eliminé contactos, conversaciones, carpetas de fotos y videos, resulta que nada es suficiente. 

Esta montaña rusa parece no tener fin, y me permito sentir, me permito sanar, y sí que todo esto va a costar más que un par de meses más de terapia, más que lo que invierto en comida, o sesiones de gimnasio, más que el tiempo que aún sigo dándote los fines de semana cuando vienes por algo de cariño. 

Suerte para ti.
Suerte para mi. 


miércoles, 25 de mayo de 2022

Huevos revueltos

 Nos he vuelto a idealizar, como si no bastara tenerte en mi cabeza todo el tiempo.

Cada que cocino, te imagino llegar a casa, con el ruido particular de tus mocasines, dejando tus llaves, billetera y blazer sobre la mesa. En el camino hacia mi, contestas algunos mensajes por whatsapp y te ríes, seguro por algún chiste de aquellos grupos en los que tus amigos comparten más que memes. Dejas el celular sobre el tablero de granito, te acercas y tímidamente me sujetas de la cintura, me besas mi cuello, mientras yo empiezo a revolver los huevos en la sartén. Me preguntas por como estoy, y te contesto que enamorada de ti; dejo la espumadera en la sartén, bajo el fuego y volteo para colocar mis manos alrededor de tu cuello. Nos besamos y sonreímos al mismo tiempo.

Quisiera dejar de soñarte, pero mentiría si te lo confieso.


domingo, 22 de mayo de 2022

Nunca serás capaz de decirme lo que sientes, porque tu ego es más grande que tus sentimientos hacia mi.
Estoy agotada, cansada de invertir energía y tiempo en ti, en nosotros.
Te amo; pero me amo más a mi.
Soy fiel a lo que siento, y sé lo que quiero.
Y aunque te quiera, necesito terminar de soltarte.

Cuídate mucho, por favor. 
Sé feliz.

sábado, 21 de mayo de 2022

en-parte

Me enseñaste a ser distante;
y que el amor nunca es suficiente.

Me enseñaste a ser egoísta,
a pensar en mi sobre todo,
sin importar que tan cercano sea el otro,
sin importar que tanto puede ofrecer el otro,
aun sabiendo que se rompe en pedazos,
está dispuesto a entregar todo incluso lo que le sigue haciendo falta.

Me enseñaste a seguir con mi vida,
a dejar de esperar;
a quitarle el poder a quién quiera y ponerlo sobre mi;
me enseñaste a huir sin mirar atrás,
me enseñaste a volver por migajas para luego desaparecer como si nada.

Me enseñaste la vida que querías, 
me enseñaste que la soledad es el camino para re-construirse;
me enseñaste que fingir estar bien no sana la herida.

Me enseñaste a ser fuerte,
a no dejarme llevar por mis sentimientos,
a darme un tiempo para mi, y solo para mi.

Me enseñaste a reconocerme,
a saber lo que quiero en la vida y volver si es necesario,
porque quiero vivir intensamente cada puto último minuto de vida que me resta,
porque no me quiero ir sin haber amado, sin haber follado, sin haber vivido intensamente,
con mis errores y aciertos, con tu compañía o sin ella.

Me enseñaste a amarte en libertad,
a fluir,
a no estancarme,
a vivir.



lunes, 16 de mayo de 2022

Eclipse

Si tuviera que hacer una lista de los placeres que he descubierto en estos últimos 3 meses, empezaría por el café a cualquier hora del día, bien cargado y tibio, obviamente sin azúcar o edulcorante, amargo como esa sensación que solté hace algunos días, cuando entendí que todo lo que idealicé quedaron en los últimos 5 años transcurridos. 

Podría continuar con el ejercicio, salir a correr, cargar pesas ejercitando mis hombros, mi pecho, mi espalda, mis piernas y hasta mi mente; montar bicicleta estacionaria, por que sí, jamás aprendí sin las rueditas de apoyo - y no me avergüenzo de eso, o soltar mis brazos de los parantes mientras monto la elíptica, para sentir que corro en el aire; la rutina necesaria y diaria de al menos una hora como mínimo para alcanzar drenar toda esa energía que me hace falta, para llenar el vacío y soltar lágrimas con cada esfuerzo, retándome siempre a levantar más peso, cuidado la técnica, como si de ella dependiera mi vida, como si así de metodológica hubiera sido llevar una relación tratando de no cagarla más, cuando ya estaba embarrada, no sé, quizás me entiendas...

Tomar mates, y fumarlos también. Sentirme adormecida me da placer, estar en modo "no sé que es lo que exactamente sucede, pero me gusta" y aquí voy de nuevo, drogándome para no sentir y sentir al mismo tiempo. Hay hierbas verdes, naranjas o amarillas, todas juntas, enroladas en papel, o puestas en una pipa. Sentir como raspa mi garganta, pasar el humo, inhalarlo y exhalarlo, entrar en trance, distorsionar la realidad, estando en el presente, viajando al futuro, recordando el pasado, sintiendo tus manos en mi cuello, alucinarte encima, y morirme en el intento de respirar... La manzanilla también es una opción, pero prefiero 20 soles de pase semanal, como si ganara en dólares para invertir en algo más que en mi salud mental.

Disfruto del sexo, pero siempre cuando es contigo, como cuando te reclamo el por qué no me has saludado y me plantas un mordisco en los labios, y me los dejas latiendo, los de abajo ya sabemos que andan mojados. Y es que ambos sabemos que no es solo sexo, es la conexión de nuestros cuerpo, es la pasión que ponemos a complacernos, es el disfrute a sentirnos afortunados de tenernos, para luego venirnos al mismo tiempo. ¿Es la manera como respiras sobre mi una droga más? Aún si nos acompaña alguien, te sigo eligiendo a ti... Por como me acaricias, por como me besas, por como me dominas y me pones sumisa antes ti, que arrodillada soy yo quién te rezo y en cuatro, me rezas tú a mi. 

Disfruto de hacer el amor contigo, de ponerme como quieres, de saciarte en mi hasta pedirme descansar 5 minutos sobre mi pecho, y pasado ello, acomodarte para ser yo quien duerma sobre el tuyo. Esa intensidad a la que huyes está presente en cada acto del coito, procurando ser mejor que la vez anterior, como si de eso dependiera acabar el ciclo del "valoro tu amistad, pero no quiero una relación contigo, ni con nadie, pero no descarto que a futuro podamos tener algo (serio)"...

Irónico ahora darme cuenta de esto, pero de todos los placeres antes descritos, soy yo, el único placer que me importa, que deseo tener siempre, de admirar mi mente, mis sentimientos, mi cuerpo, de cuidarme, para prestarme siempre contigo, de querer soltarte y que sigas ahí, como si yo también fuera tu placer favorito. ¿Y qué pasa si los combino? Si mi día tuviera café, ejercicio, hierba, tu amor y mi existencia, sabemos bien que sería mi día favorito, pero no se puede tener todo en la vida, por eso ahora sólo me quedo conmigo y tu recuerdo, tu olor en mi memoria, tu mirada en mis sueños, y tus oportunos besos cada que te veo. 

De todos los placeres, tú eres mi favorito, pero estoy conmigo.

sábado, 16 de abril de 2022

Luna Llena

Si de mi dependiera, no hubiese permitido que me pierdas. 
No te di el 100, porque estaba en 50, pero imagínate si me hubieras disfrutado sana y completa. 
No supiste esperarme, no supiste acompañarme y está bien, nadie nace sabiendo, pero se aprende en el proceso e intentar está bien; irse, también.

Me sigo preguntando por los "qué hubiera sido", pero debo parar. El presente está esperándome, y aunque siga creyendo que es contigo, te tengo que soltar.
¿Cuántas veces más me convenceré que tiene que ser así? Cuando es obvio que no quiero que sea. 

Te doy chance, te acercas, te vas, regresas, ahora yo huyo, pero vuelvo a ti y no sé. NO SÉ qué hacer, porque te quiero, pero me quiero también y me quieres pero, no sé. 

Pactar nuevas reglas, definir el espacio, compartir de nuevo, empezar de cero... Estoy al 100 pero, ¿tú?

Quizás querer no es suficiente, y amarte solo sea un pretexto. Yo estoy dispuesta a re - construir, pero esta decisión debe ser bilateral y no me voy a exponer una vez más. 

Cerremos el ciclo y empecemos, que lo que menos quiero ahora es perder energía y terminar de perder mi tiempo. 

Decide tú, porque yo ya sé lo que quiero.




viernes, 1 de abril de 2022

Cafune

Probablemente no volverás a saber de mi, por mi.
Pero vendrán viejas amistades que preguntarán qué es de mi, cómo estoy y que por qué ya no me ven (cerca de ti). 

No creo que te pregunten por mi, pero si por ahí me encuentras en alguna conversación, ten la seguridad que jamás estuve ni estaré ahí.

Hagamos de cuenta que no existimos, sigamos negándonos al amor que sentimos. Yo estoy bien, tú estás mejor.

Duele irse, pero es lo que toca.
Duele perder amistades que son parte del vínculo, pero quizás tampoco nunca fueron mis amigos, siempre fueron más tuyos que míos. 
Yo siempre estuve de paso, tratando de encajar, y seamos sinceros, a nadie le hacía bien que estuviera en tus planes. 

Me quedo con la última despedida. Me quedo con tus lágrimas cayendo sobre tus mejillas, aflorando toda la impotencia, toda la rabia, todo el amor que decías tener por mi. Eres feliz, eres libre, siempre lo fuiste y no dejaras de serlo. Sigamos así, porque te hace bien, y es lo que elegiste.

Me pediste tiempo, me pediste espacio. Tienes el universo entero para ti, disfrútalo. A tu edad yo estaba disfrutando del amor en pareja, y ahora me estoy privando de aquello, pero todo tiene una razón y un porqué. Al final, lo entenderé. Al final, cuando llegue al final de Dios sabe qué...

Te recuerdo siempre con amor, con ternura, y es inevitable no sentir la conexión inclusive cuando no me hablas ni por casualidad. Gracias por estar, pero debes terminar de irte. Yo te estoy dejando ir, déjame por favor irme también. 

Te amo, siempre te amaré. 
Yo no mentí cuando dije que eres el amor de mi vida. 
Lo serás hasta que me conciban en la que sigue.

Gracias por todo lo bueno, gracias por todo lo malo. 
No sé si en otra vida, nos volvamos a encontrar y si es así, por favor, no te vuelvas a rendir...
O solo no me digas que no te vas a ir.


lunes, 28 de marzo de 2022

Tú tan a veces, y yo tan por siempre

De tanto buscarte me perdí a mi,
hoy volví a soñarte y veme aquí...
Por algo siempre vuelvo a ti,
y me pregunto por qué
solo funciona si no quieres irte...
Estoy viviendo de recuerdos,
pero al final solo quiero volver a donde fui feliz.
Yo sigo amándote,
aunque no esté aquí.

Me enamoré de un corazón vacío,
quisiera olvidarte, pero no puedo...
Nuestro último shot y volvemos a nuestro lugar seguro.
Abrázame fuerte, no quiero volver a verte...
Quiero verte volver, pero nunca te alcancé.
Tú tan a veces, y yo tan por siempre.


jueves, 24 de marzo de 2022

Carta en el tiempo

Quiero escribirte, muero por hacerlo, pero vivo para no intentar si quiera, por casualidad, hacerlo. 

¿Podemos dormir juntos hoy?
Hablo de reposar en tu pecho, como el último fin de semana, en donde me engancho a tu cuerpo y me pides que me enrolle en ti; de cuando respiro tu aliento, de cuando siento tus latidos y la textura y el calor de tu piel. 
Hablo de esa intimidad que tenemos después de sexo, el hacer el amor en el contexto más sutil del haber, del existir. 
Hablo del momento más hermoso que siempre hemos tenido, aquel en el que no importa si húmedos o sudosos, nos impregnamos el uno del otro. 
Hablo de ese momento en donde te digo que te amo en silencio y tu me abrazas como si me amaras, también.

Yo no quiero convencerme de que nací para amarte, pero quiero. Hoy quiero estar junto a ti, en ti. 

¿Podemos vernos?
Y sí, solo vernos. Ver tus ojos chinos, tu perfil empinado y tus labios gruesos; tu sonrisa perfecta, tus orejas delicadas y perforadas, tu pelo negro, largo y medio ondulado; el collar en tu cuello, tus lunares y observarte, solo hacerlo porque sí, porque el placer que siento al hacerlo es más profundo que cualquier penetración consentida. Verte también es disfrutarme.

Quiero hacerte el amor hoy, pero entre poder y querer, no sé si estemos de acuerdo. 

Dime que podemos. 
Dime que también quieres.
Dime y voy.
Dime y vienes.
Dime, que soy y seremos, solo por hoy, si así lo quieres.

miércoles, 23 de marzo de 2022

X230422X

Te amo, y lo escribo aquí porque no debo escribirte más.
Te dije que eras una droga y ahora me encuentro en abstinencia. 
Dueles, dueles mucho; pero tengo que sacarte de mi.
Te extraño, nos extraño, y no hay segundo del día en que no te piense.
Dueles, Dueles mucho; y todo el amor que tenía me lo estoy dando a mi, pero quiero seguir dándotelo a ti. ¡Qué afortunado eres! Y, ¡qué afortunada soy, por quererte!

Gracias por seguir aquí, omnipresente. 

domingo, 20 de marzo de 2022

como un G




Si no lo puedes tener, lo tendrás que soltar.
No estoy a tu lado pero te deseo paz y libertad.

Solo el amor con amor se paga;
Nada te debo y tú no me debes nada.

El querer que no se da, ¿Dónde acaba?
Si encuentro el tuyo ya será deuda pagada.

Si no lo puedes tener, mejor dejarlo ir.
Qué pena cuando quieres algo pero Dios tiene otros planes para ti.

Que siempre te querré, aunque no te tenga.
Que siempre me tendrás, aunque no me quieras.

jueves, 10 de marzo de 2022

sueño.

Hay días en donde quisiera seguir durmiendo, solo para continuar mi historia de amor contigo.

Soñé que llegabas a casa, mientras yo sacaba la lasagna del horno. Me dabas una nalgada y olías mi cuello, mientras yo te esperaba mojada y nerviosa, con ganas de treparme a tu cuerpo. Dejé el depósito de comida sobre el tablero, me tomaste por la cintura y me volteaste hacia ti. Me besaste como siempre lo haces, mordiste mi labio inferior jalándolo hacia ti, como si quisieras romperme la boca, cerrando así el momento con un te amo, tierno y sádico. 

Me tomaste de la mano y me llevaste a la barra, me cargaste y me sentaste sobre ella, yo te abrí las piernas y encajaste. Te cogí de nuca, te jalé hacia mi pecho, mientras tu labios y tu lengua me salivaban y yo solo pensaba en cómo es posible que te tenga así... Tan mío, yo tan tuya, entregada a ti.

Te alejaste con el pretexto de que debías lavarte las manos y yo hice puchero. Me bajé de la barra y te seguí hasta el baño, siempre dejas la puerta abierta y es ahí donde entro yo, abrazándote por la espalda, oliendo tu cabello, recostando mi mentón sobre tu hombro derecho, mirándote por el espejo y sonriendo, porque te tengo. Sacudes las manos, me despego de ti y doy un paso hacia atrás, tú mientras te secas las manos escapo de ahí. Estoy descalza, resbalo. Te ríes y me dices que soy torpe, volteo y te miro con fastidio, "es que así soy" te digo y me persigues hacia la cama. De un brinco me tiro en ella y tu me quedas mirando desde la puerta. Me encanta cuando te quedas parado observándome, es ahí cuando quiero correr hacia ti nuevamente para llenarte de besos y abrazarte. Te pregunto qué es lo que pasa, mientras mis pies cuelgan de la cama, tú me dices con la voz de siempre "nada, no pasa nada". Y es que sí quiero que pase. 

Me doy vuelta, boca abajo, giro levemente la cabeza para mirarte y te veo venir sobre mi. Tu cuerpo me aplasta completamente y tus manos cogen mis manos, las dos juntas y me tienes ahí. Tu respiración te delata, estás excitado. Yo solo río. Me respiras al oído y me dices que si voy a hacer lo que me pidas y te digo que si, mil veces si. Sin pensarlo, sin dudarlo. Sí. 

Mantienes mis manos juntas con tu mano izquierda, haciendo fuerza como para no escapar de ti, con tu mano derecha empiezas a acariciar mi cuerpo, el lado de mis senos, mi cintura, mi espalda, mis nalgas y mis piernas. Te deslizas con una delicadeza que solo tú y nada más nunca antes lo ha intentado. Me conoces bien y sabes como empezar. Lo que nunca sabemos es cómo vamos a terminar...

Quiero que me sueltes, forcejeo. Pones más fuerza y empiezo a sentir mis muñecas adormecidas, me gusta que me domines, que te pongas prepotente y muestres dureza. Que seas firme y seguro, que sepas que no me haces daño, pero me presionas como para tenerte miedo, y yo solo te deseo. 
Sueltas levemente mis muñecas y te vas deslizando sobre mi cuerpo, me besas con la ropa aún puesta y levantas mi polo, dejando al descubierto mi trasero, lo besas y lo lames, como si fuera un plato dulce que ansias comer. Me tienes relajada y en ese momento casi inconsciente, que cualquier cosa que hagas estoy dispuesta a rendirme a ti. Me comes las nalgas fuerte, me nalgueas con desidia, me abres las nalgas y tu lengua pasa por ahí. Se me achina la piel y yo solo quiero dejar de retorcerme de placer... te paro el culo, y tu sigues ahí, disfrutando el banquete como si no hubiera mañana, y tu lengua, y tus labios, y tu sed por dejarme mojada no van a deterse hasta completar tu cometido. Metes la lengua, la sacas y pones un dedo índice en aquel orificio, que ya ante el placer, ha cedido para ser el principio del fin. Juegas con él, mientras lo introduces lentamente, yo te abro el culo, como si fuera costumbre, cada miércoles después del fútbol. ¿Qué vamos a hacer?

Vibra el celular, estoy despierta.
Mojada y con un mensaje tuyo, todo bien. 

¿Cuántos sueños más sin terminar vendrán?
¿Cuántos sueños se harán realidad?

jueves, 3 de marzo de 2022

Feliz 28 de febrero

Donde las palabras no hagan falta, ¿ahí es?

Que me toma menos de 2 segundos temblar después de verte, me pongo nerviosa, intento no sonreír, pero aquí me ves, más torpe que ayer, menos estúpida que mañana. 
Te acercas a mi, me abres los brazos, reposo en tu pecho y yo solo quiero besarte, preguntarte como te va y si todavía me amas... Bien, todo bien, y sigues tu camino.

Que te acompañe si no estoy ocupada, y juré no volver a ti, pero aquí estoy, a tu lado, cambiándole las letras a las canciones mientras tu manejas a 60. Te miro y quiero besarte, te concentras en la ruta y evitas mirarme, y río de los nervios, y me muerdo la lengua y aprieto mis piernas para no sentir que te tengo. Porque te tengo. 

Bajamos del carro, te acompaño a la distancia. Solo quiero acercarme y tomar tu mano, olerte el cuello y decirte que te amo. Entras al banco, te miro desde lejos mientras haces la cola, evito hacer contacto visual y disimulo, me tropiezo, me escondo y vuelvo a verte con la oportunidad de cruzar con tu mirada. Sales y nos vamos. Me preguntas si deseo algo del kiosko, te digo en mi mente que necesito un beso tuyo, para no sentirte, pero agradezco que hayas comprado agua, aunque dudes de su procedencia. Bebemos de la misma botella, y te quiero besar, pero me pongo el cinturón de seguridad para evitar cualquier movimiento involuntario. 
Dios un par de vueltas, no hay agentes para depositar dinero, dan las 7 pm, llamas a tu madre, le dices que vas camino a casa. Yo solo pensaba en no moverme para no dejar ningún cabello en el carro, por miedo a que ella los encuentre...

Llegamos a casa y me dijiste que me cuidara, voltié y me acerqué a ti para despedirte y respiramos el mismo aire, no sé si tú, pero yo me sentí en el mismo infierno y contigo, tú mi ángel. Te besé, nos besamos y nos volvimos a besar, y te mojabas y me mojaba, y me temblaban las piernas, y movía mis manos y te apretaba el pantalón, y querías coger mis tetas, pero eso fue todo. Me dijiste que irías en la semana al depa y que me pasarías la voz por si estoy libre, poder acompañarte. Acepté sin saber cuándo sería y si estaría desocupada. Sí a todo. 

Me golpeé bajando del carro, porque soy torpe. 
Abrí la puerta de mi casa, volteé y te vi. 
Te volví a sentir. 
Y quise correr hacia ti, pero ya había entrado a casa y tu arrancado. 

Nos quedamos húmedos de placer. Yo esperando verte volver, tú, no sé.

sábado, 19 de febrero de 2022

19 febrero

 8.49 am

En 10 minutos empiezo mi primera sesión de terapia. Tengo sentimientos encontrados, es algo que quería hace años y, si bien hace 7 años tuve mi primer acercamiento a algo parecido a esto, creo que hoy nada es igual al pasado y determina definitivamente uno de los momentos más exitosos y orgullosos de mi vida.

He tenido una mala noche, intenté dormir temprano, pero cada 2 horas despertaba buscándote. En estos cortos ciclos de sueño, has estado presente, tú y tus amigos, como si fuera un dejavú, como si viviera algo que aún no ha pasado, como si fuera todo real hasta el punto de ver tus ojos brillar, y sentir como tomas mi mano...

El cambio lo empecé hace una semana, me obligué a hacer cosas que tenía que haber hecho hace mucho tiempo, pero de eso se trata, de no estancarme y seguir trabajando para mi y los míos, para lo que quiero en mi vida, hasta que esta misma decida.

Tengo nuestras fotos en el escritorio y quiero invocar siempre ese momento, en donde me tienes y donde te tengo. Antes ya se me habían cumplido un par de deseos, y soy fiel creyente de la magia del universo.

Quisiera escribirte los buenos días, preguntarte como dormiste y si fue suficiente lo que descansaste. Quisiera escribir que te amo, que te extraño y que ya cuento las horas para verte. 

¿Te acuerdas del librito de sueños que tenía contigo? ¿Aquel en donde te escribía poemas y te regalaba recuerdos? Ahora tengo uno solo para mi, en donde también escribo de ti, de nosotros, porque sigues siendo parte de mis días, de mi vida. Y mi deseo es que algún día, mientras acaricio tu cabello en la cama, poder leértelo, como si fuera un cuento, hasta que te quedes dormido; abrigarte los pies, acomodarte las almohadas y esperar a que me invites a recostarme en tu pecho, como siempre había sido. Mis 5 minutos infinitos.

Te amo hoy también.


jueves, 17 de febrero de 2022

16:16

 A veces me pregunto si tienes tiempos muertos, esos en donde te quedas pensando en nada, donde ya cumpliste todas tus responsabilidades, en donde ya atendiste todas tus prioridades, ese momento en el que te quedas en el vacío, pensando o quizás no pensado o tal vez deseando mantenerte ocupado porque no estás cansado, y si es ahí donde me recuerdas, en donde quisieras salir a buscarme, venir a verme, pero te retienes, porque eres fuerte. 

A veces tengo tiempo muertos, esos que se dan antes de ir a dormir, en donde quiero tener la mente en blanco, pero me llegan tus recuerdos, con ellos las risas y la sensación de que te tengo todavía, de querer escribirte y preguntar cómo te fue en el día y si me extrañaste, si todavía piensas en mi, en nosotros.

Son las 4 de la tarde y tengo un tiempo muerto, terminé mis pendientes del trabajo y me queda 1 hora para ocuparme en algo, pero me encuentro escribiendo sobre ti, en lo lindo que te veo en fotos, en lo hermoso que me haces sentir cuando te veo en videos, me imagino tu sonrisa en este momento, pidiéndome que deje de mirarte cuando es lo único que quisiera hacer durante el resto del día.

Pongo música para no pensarte, pero las letras me hablan de ti, de nosotros, de lo que fuimos y hoy no somos, pero podemos ser, a la distancia. Si cierro los ojos, tu aroma aparece, y si respiro despacio, puedo sentir tus manos en mi piel. Quisiera dejar de invocar mis recuerdos a tu lado, pero me permito sentirte en este espacio muerto, imaginando el día en que te vuelva a ver, en intentar ser menos torpe, de no tropezarme para que te rías de mi, y siga tan enamorada de ti como lo estoy ahora.

He aprendido a valorar tu ausencia, y es que nunca te sentí así. Llegaste a mi vida a enseñarme a amar, y juro que no sabré como agradecerte. Quizás sigo esperando una señal del destino para tener oportunidad de decirte cuánto he mejorado, y probablemente te sientas orgulloso de mi. Pero va, son 2 semanas sin ti, imagínate lo que podría lograr en otras 2, 3, 5, mil.

Todos los días le hablo a la almohada, a los espejos, a las paredes sobre ti, lloro un poco y vuelvo a sonreír. Te extraño mucho, y no voy a decir que me haces falta, porque era antes yo la que se hacía falta.

Estamos creciendo, y eso es lo más importante. 

Seguiré escribiendo en mis tiempos muertos.

Te amo.

miércoles, 16 de febrero de 2022

Hoy.

¿Dime cómo me quito estas ganas de ti?

Siento que aún tocas mi cuerpo, siento que aún estás dentro de mi. Despierto todos los días a las 4 am, palpitando aceleradamente, con la respiración a tope, con el vacío que dejaste, pero sintiéndote a mil. 

Cierro los ojos para conciliar otra vez el sueño, pero te veo ahí, con esos ojos chinos que me vuelven loca, y me retraen denuevo hacia ti. Tengo prohibido tocarme, porque no quiero recordarte, pero me aprieto fuerte y me golpeó ciertas partes para calmar la sed de ti, empiezo nuevamente a recordarnos, pensando en la siguiente pose que me irías a poner. 

Que me domines otra vez, eso quiero, que me ames fuerte como (antes de)ayer. Te faltó ahorcarme, para olvidarte. Te quiero ahora encima de mi. 

Pregúntame quién soy para responderte, para entregarme completa hacia a ti. Nací para entregarte todo aquello que no me permites darte. 

Veámonos una vez más, por favor, necesito sacearme.